‘Los primeros 1.000 días de vida’, determinantes para el ser humano

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Fue para mí como Presidente de la Sociedad Colombiana de Pediatría (SCP), un verdadero motivo de orgullo y satisfacción el haber tenido la oportunidad de inaugurar el I Simposio Nacional de Nutrición ‘Los primeros 1.000 días de vida’, este importante y nuevo evento académico de la SCP, el cual deberá tener continuidad año tras año y contar con todo el apoyo y trabajo desde nuestra Junta Directiva Nacional, para seguir intercambiando conocimientos que conlleven a una mejoría de la situación de salud en los niños, niñas y adolescentes del país.

En este simposio, se abordó el tema de los primeros 1.000 días de vida, dada su importancia y las múltiples investigaciones que han evidenciado que este periodo del ser humano, el cual abarca desde la concepción, pasando por la gestación, hasta los dos años de edad, juega un papel preponderante en el potencial de desarrollo físico, intelectual y emocional de la salud futura del niño, y no tiene discusión el impacto y rol fundamental que el entorno ambiental y la nutrición cumplen en este tiempo.

Dada la relevancia de esta verdadera ventana de oportunidad, la SCP decidió abanderar a nivel nacional la temática para contribuir y promover la salud desde el embarazo y para toda la vida, y concientizar a nuestros pediatras y residentes, así como al personal de salud; con el único objetivo de despertar en la comunidad el interés por la nutrición adecuada en esos primeros 1.000 días de vida.

No olvidemos que la salud futura comienza a condicionarse desde el vientre materno. Más allá de la carga genética del bebé, el ambiente a su alrededor impacta sobre cómo se expresarán esos genes (lo que se conoce como ‘epigenética’), comenzando antes del nacimiento. .

Un embarazo saludable y óptimo desde el punto de vista nutricional, contribuirá directamente a la salud futura del bebé, reduciendo el riesgo de padecer enfermedades crónicas en la adultez. Por lo tanto, el principal mensaje para las mujeres colombianas, es que deben prepararse para concebir; esto significa fundamentalmente, optimizar su peso (si tiene exceso, perderlo y si les falta, ganarlo) y si se alimentan en forma inadecuada o llevan una dieta vegetariana, deben consultar con un especialista en nutrición, de tal manera que sea equilibrada su dieta y no tengan deficiencia de nutrientes.

Como pediatras en ejercicio, no desconocemos que la lactancia materna y una nutrición complementaria, oportuna y adecuada, completan el esquema virtuoso que favorecerá el óptimo desarrollo físico, intelectual y emocional del niño.

Debo recalcar que, como representante de la SCP, nosotros apoyamos y defendemos 100% la leche materna como el alimento ideal, que contiene lo más perfecto para el bebé por su composición equilibrada, la cual es fundamental para que desarrolle todo su potencial físico, intelectual y emocional.

Sin duda, el desarrollo de este evento aporta a nuestros conocimientos en la nutrición del binomio madre – hijo, pero sobretodo debe servir para continuar con el refuerzo del compromiso social que como pediatras y padres de familia tenemos con nuestra niñez. Recordemos que los pediatras somos los médicos de cabecera de los niños, niñas y adolescentes, y debemos convertirnos en sus defensores en todos los foros científicos y de la comunidad, a los que tengamos acceso.

Por otra parte, desde la SCP estamos trabajando arduamente en el desarrollo e implementación de nuestro Plan 2014 – 2016, el cual está dando sus frutos a través de un trabajo conjunto (miembros, administrativos, pediatras, capítulos y familias en general). Éste nos ha servido de directriz a nivel país y nos ha dado unos lineamientos comunes para nuestras regionales, lo cual generará como producto final, una entidad fuerte, cohesionada y sólida, con gran mística y alto sentido de pertenencia, generando respeto y autoridad responsable en los temas pediátricos ante los entes privados y gubernamentales.

La salud, tema muy discutido y de moda, atraviesa hoy en el mundo un accidentado camino por diversos intereses económicos, políticos y sociales, y en nuestro país, se encuentra en medio de un controvertido y acalorado debate una vez que la Corte Constitucional revisó y dio paso a la llamada Ley Estatutaria de Salud, la cual fue sancionada por el Presidente de la Republica e inicia ahora su reglamentación. Se han generado un sinnúmero de manifestaciones y esperamos que en esta oportunidad, tengamos una gran injerencia, dado que fuimos participes indiscutibles y actores de primera línea en su construcción y ahora en su manejo.

Pero más allá de los mecanismos de manifestación, unos acertados y otros no tanto, a mi humilde parecer son estos eventos los que congregan el saber de nuestros pediatras y maestros, demostrando que sólo el ejercicio juicioso, acertado y prudente de nuestro actuar, es la base del sagrado juramento por preservar la vida y la salud de nuestros pequeños pacientes: los niños, indefensos y víctimas inocentes de tantos conflictos y enfermedades, cuya tierna sonrisa y agradecimiento debe ser nuestra mayor motivación a la hora de practicar este maravilloso arte de la pediatría.

Seguiremos realizando un trabajo en equipo con las universidades, sus facultades de medicina y las cátedras de pediatría y puericultura, para que se refuerce el sentido ético y humanitario de esta profesión y así, logremos reconstruir el verdadero ejercicio de nuestra labor médica.

Muchas gracias a todos los que nos acompañaron en este importante simposio y esperamos que se hayan cumplido todas las expectativas e impactado positivamente en el desarrollo tanto personal como profesional, para que los únicos y verdaderos beneficiados sean siempre nuestros niños y adolescentes.

 

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Nicolás Ignacio Ramos Rodríguez

Presidente Sociedad Colombiana de Pediatría (SCP)