Hace pocos días dos niños, Luis Sebastián Preciado (13 años) y Ángelo Cabezas Pierre (14 años), murieron víctimas de unos explosivos arrojados a unos policías en el corregimiento de Chilvi, cerca al casco urbano de Tumaco.
Esta terrible tragedia pasó casi desapercibida. Lastimosamente los colombianos, en medio del actual ajetreo noticioso, hemos ignorado este hecho, condenable por si solo, que es una solo muestra dolorosa de una problemática vergonzosa y compleja: los niños protagonistas y víctimas del conflicto armado en el país.
Según estadísticas confiables, en 28 de los 32 departamentos del país y en Bogotá se involucra a los niños en el conflicto armado. Unos 6.000 a 10.000 niños mal contados han sido reclutados por diferentes grupos ilegales y últimamente 21.373 niños han sido víctimas del desplazamiento forzado por la guerra.
En este contexto, conscientes de los condicionantes sociales y de abandono que propician este situación, levantamos nuestra voz de protesta contra los actores armados ilegales. En solidaridad con todos los niños de Colombia, directamente o indirectamente afectados por la guerra, la Sociedad Colombiana de Pediatría-SCP, integrada por profesionales que a lo largo y ancho del país socorren a los niños afectados por el conflicto armado, convoca a una manifestación digital para exigirles, a quienes violan sus derechos, que los saquen de sus actividades criminales.
La Sociedad Colombiana de Pediatría-SCP invita a todos los colombianos, niños y adultos, y a la comunidad internacional, colegas pediatras y médicos, líderes de opinión, periodistas y usuarios de las redes sociales del mundo a que sigan el hashtag: #Delutopornuestrosniños y este miércoles 21 de mayo, nos vistamos de negro y nos tomemos una foto para Instagram, Facebook y medios sociales, con un mensaje dirigido a los causantes de este infamia, para que de una vez por todas no involucren a los niños en la guerra.
Participemos, para que el 21 de mayo próximo, la voz de los niños de Colombia sea escuchada en el mundo.
