El neurólogo colombiano Carlos Pardo Villamizar, especialista en enfermedades inflamatorias del cerebro y director del Centro de Investigación en Mielitis de la Universidad Johns Hopkins, de Maryland, Estados Unidos, habló del  Proyecto Neuro Zika Colombia, que busca estudiar la epidemia de Zika en su propio terreno. También se refirió a la recién creada Red NEAS, o red de  análisis de neuroviruses emergentes en las Américas (Neurovirus Emergent in the Americas Study).

El especialista habló con El País al término de su ponencia en el XII Congreso Colombiano de Neurología, realizado en Cali   bajo la dirección de la  decana de la Facultad de Ciencia de la Salud de la Universidad Icesi, Yuri Takeuchi, especialista en neurología de la Fundación Valle del Lili.

¿Qué es la red para estudiar el Zika?

Diferentes grupos en Colombia estamos trabajando para caracterizar los problemas neurológicos e inflamatorios causados por el virus del Zika. El NEAS es un estudio colaborativo que está centrado en la Universidad del Valle, porque allá es donde se están haciendo las pruebas de laboratorio para establecer el diagnóstico del virus. La Universidad del Valle está diseñando el estudio epidemiológico también.

¿Qué otras entidades participan?

Al estudio están asociadas otras instituciones a nivel nacional: las universidades Icesi, de Cali; la de Pamplona y el Hospital  Erasmo Meoz, de Cúcuta; la de Antioquia, la  Libre y la del Norte, en Barranquilla;  la SurColombiana de Neiva, la  Industrial de Santander, en Bucaramanga, y otros colegas interesados en investigar los problemas  neurológicos.

Y hay una colaboración internacional también…

Las instituciones internacionales como el Hospital Johns Hopkins estamos colaborando para  facilitar la transferencia de tecnología y que los grupos de investigación en Colombia puedan hacer el diagnóstico y hacer la evaluación de los problemas neurológicos. Eso ya se está haciendo.

¿En qué van las investigaciones?

El grupo de la Universidad del Valle ya ha establecido las pruebas de diagnóstico del virus por biología molecular. Los diferentes grupos han aportado evaluación de pacientes, muestras biológicas que están siendo analizadas por los investigadores en Colombia y así se  está entendiendo  mejor qué es lo que está pasando con los problemas neurológicos ocasionados por el virus del Zika, como el síndrome de Guillain-Barré, la mielitis (inflamación de la médula) y la encefalitis (inflamación del cerebro). Es un estudio cooperativo, multicéntrico, una colaboración horizontal en la que no necesariamente alguien está dirigiendo, pero todos están participando en forma igual y contribuyendo.

¿Guillain-Barré, mielitis y encefalitis son secuelas en adultos o en niños?

Nuestro grupo está enfocado en problemas inflamatorios del Sistema Nervioso Central (SNC) en adultos. No estamos hablando de microcefalia, otro tema similar, pero está siendo tomado por otros grupos de investigación.  Una parte del grupo también está interesado en problemas maternofetales y microcefalia, pero nosotros,  en las complicaciones paralizantes producidas por el Zika.

¿Qué hallazgos tienen?

Estamos en la fase inicial de evaluación del problema porque el Zika llegó a Colombia en octubre de 2015 y se ha observado un incremento y expansión de la epidemia en diferentes regiones del país, y brotes o incrementos de casos de enfermedades neurológicas paralizantes como Guillain-Barré, mielitis y encefalitis. No tenemos cifras de nuestros estudios. Hay entre  120 o 140 casos, datos derivados  del Instituto Nacional de Salud, INS.

¿Cuál es la hipótesis de cómo actúa el virus de tal manera que causa estas enfermedades paralizantes?

Pensamos que el virus puede estar causando una reacción inmunológica que produce enfermedades inflamatorias en el SNC o en el Sistema Nervioso Periférico, SNP. O que el virus puede estar atacando en forma directa áreas, estructuras o componentes del sistema nervioso, como los nervios periféricos. Pero eso es parte de la investigación, lo que estamos tratando de  dilucidar.

¿O sea que el Zika  resultó más grave que el dengue o el chikungunya?

Exactamente. Una de las observaciones es que los problemas asociados o que presumimos sean  por infección del Zika pueden producir más problemas neurológicos que el dengue. En otras palabras, que la agresividad del virus de Zika es  mucho mayor que la ocasionada por el dengue –si lo logramos probar– e incluso  puede ser mucho mayor que la producida por el chikungunya.

Aunque su línea de investigación no es la de efectos de Zika en feto, qué nos puede adelantar al respecto, puesto que en Colombia hay más de 6000   gestantes infectadas…

Hay preocupación de que se pueda presentar  un fenómeno similar al observado en Brasil, pero estamos en una etapa muy temprana de investigación. El virus entró a Colombia en octubre pasado y un embarazo demora 9 meses:  si va a haber más  casos similares a los de Brasil, los vamos a ver entre mayo y junio. Es prematuro tener una conclusión al respecto en Colombia.

La prueba para detectar el virus es efectiva en los primeros cinco días de haberlo contraído…

No necesariamente. Y eso es un trabajo de investigación que se está haciendo. Los estudios en otros países sugieren que el virus puede permanecer en el organismo un tiempo más largo. Y comparado con el dengue y con el chikungunya, el virus puede ser detectado en otros fluidos, como la saliva y la orina. Estamos investigando si esa es una realidad en la población colombiana también.

¿Y la transmisión por vía sexual? Dicen que ya fue  confirmada en una pareja… 

Sí, pero eso es tema de investigación, hay pocos casos y están en estudio. Ahora no se puede asumir o tener una conclusión muy fidedigna de eso.

¿Qué les aconseja  a las gestantes?

Lo más importante es que sigan las normas establecidas por  MinSalud y el INS. Los protocolos de seguimiento de mamás en Colombia ya están establecidos, lo más importante es que ellas acudan a estos controles.

¿Cómo cree que el MinSalud y el INS  han manejado el  sistema de alertas con relación al brote del Zika?

Colombia estuvo y está más preparada de lo que estuvieron los brasileños para confrontar la epidemia y tenemos mejor situación porque estamos alerta a problemas de microcefalia. Ya hay una sensibilización muy buena sobre la aparición de secuelas  neurológicas, las campañas de educación han sido efectivas y la intención del Minsalud y del  INS es que se implemente una campaña de vigilancia de los problemas maternofetales y de los neurológicos.

Si   el riesgo de microcefalia es  de 1 por cada 1000 recién nacidos vivos,  ¿porqué a otros 999 no les daría?

Esas son cifras son arbitrarias. El riesgo no es conocido.

¿Qué conlleva la microcefalia?

La microcefalia es un problema neurológico de desarrollo del cerebro en útero. Las consecuencias son diversas. Definitivamente hay problemas de desarrollo neurológico, en el futuro puede haber problemas de crisis convulsiva, problemas de aprendizaje, de visión, de audición, es un complejo bastante diverso de manifestaciones clínicas. La microcefalia es  una disrupción masiva del desarrollo cerebral y eso tiene consecuencias muy  severas.

¿Y qué pronóstico de vida tiene un recién nacido con este diagnóstico?

Una cosa es el pronóstico (de vida) y otra la cantidad de secuelas neurológicas. Depende de la magnitud del problema de desarrollo cerebral que estos niños tengan: unos pueden tener problemas de desarrollo bastante acentuados, que van a producir manifestaciones clínicas bastante severas, y otros pueden tener menos problemas de desarrollo y obvio, la magnitud va a ser menor. De todas maneras, las   consecuencias son bastante difíciles porque muchos de estos niños van a tener efectos de desarrollo neurológico que van a tener consecuencias por el resto de la vida.

Perfil
  • El Dr. Carlos Pardo Villamizar  es Profesor Asociado de Neurología y Patología en la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos.
  • Es neurólogo clínico y el investigador principal  del Laboratorio Neuroimmuno-pathology. También es  neurólogo del Centro de Esclerosis Múltiple,  miembro del Grupo de Investigación de Neuro- ciencias de VIH y del Centro de Mielitis Transversa.
  • Las líneas de investigación  clínica y de laboratorio del Dr. Pardo se centran en los estudios de mecanismos inmunopatoló-gicos y molecu-lares asociados  con trastornos neuroinmunes como mielitis transversa, esclerosis múltiple, NeuroAIDS, la epilepsia y el autismo.