El ministro Alejandro Gaviria se reunió con algunos familiares de niñas en El Carmen de Bolívar.

El resultado de las muestras de sangre que el Ministerio de Salud tomó la semana pasada, a las menores de edad de El Carmen de Bolívar que atribuyen sus desmayos y otros malestares a la vacuna contra el VPH, indicó que no existe intoxicación ni con plomo ni con otros metales pesados. (Lea también: Tensión en Carmen de Bolívar por visita del Ministro de Salud)

Así lo relevó el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, en su visita al municipio, quien agregó independiente de si la causante de los síntomas es o no la vacuna – que no contiene plomo- lo importante es tener un encuentro con la comunidad que “indudablemente está sufriendo y necesita acompañamiento, no de un día sino permanente”.

El Ministro advirtió que se desplazó a Bolívar con el propósito de tener un diálogo y establecer confianza con la comunidad, porque la forma en que se ha manejado la situación estos días era “inverosímil”. Es decir, de la rueda de prensa de Bogotá editaban una frase, los medios de comunicación, y eso era lo que Carmen de Bolívar escuchaba y viceversa.

“Queríamos tener un diálogo en la iglesia con las familias, yo había dicho que si me tocaba dormir aquí lo hacía, pero básicamente las familias que quisieron tener el diálogo no pudieron hacerlo y desde lo pecuniario y financiero la perjudicados es la comunidad”, sostuvo Gaviria.

El Ministro dijo que dentro del plan de acción para atender a las menores de edad está garantizarles acceso a todo tipo de consultas, acompañamiento por médicos y grupo de especialistas y sociedades científicas.

Gaviria descartó que haya necesidad de atender el caso con médicos internacionales y garantizó que quienes están al frente de la situación no trabajan con el Estado sino que son independientes, que trabajan en hospitales privados con todas las credenciales.

Debido a que la principal queja de la población iba en el sentido de que no existiera una causa médica de los síntomas, el Ministro sostuvo que para el gobierno está claro que las niñas no están simulando y que no necesitan un diagnóstico definitivo para acompañar a la comunidad y hacer lo que tienen que hacer.

“No estamos desconociendo la problemática. Unos son los factores orgánicos, que no se han encontrado en las pruebas, otros los ambientales que los estamos investigando y otros los psicológicos que no hay que descartar”, agregó.

Gaviria insistió en que no hay evidencia de manipulación del lote de vacunas, ni del rompimiento en la cadena de frío, pues si así fuera los síntomas se habrían presentado días y no semanas después.

Por su parte, el párroco Leopoldo Corrales dijo que “definitivamente la iglesia, por razones muy obvias, hay alteración y sentimientos encontrados, mucha gente no va respetar el lugar como sagrado que es. El Obispo me dijo que soy autónomo y dentro del santuario no se hace este encuentro”.

La reunión programada para hoy entre el ministro de salud, Alejandro Gaviria, y los padres de familia del Carmen de Bolívar, no se ha podido realizar como estaba planeado inicialmente, por el ambiente tenso que se vive en los alrededores de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen desde tempranas horas de la mañana. Un centenar de pobladores se aglutinó en la plaza principal del pueblo, y obligaron a los comerciantes a cerrar sus negocios.

Los ánimos en el municipio están alterados, pese a la intervención del gobernador de Bolívar, Juan Carlos Gossaín, quien llegó al sitio de la reunión para pedirle calma a la comunidad.

Gaviria llegó al pueblo desde las 9:00 a.m. en un helicóptero que aterrizó en el estadio de fútbol, donde esperaba que se coordinara plenamente la logística de la reunión en la iglesia, que al final, no se pudo dar tras la recomendación de monseñor Jorge Enrique Jiménez, quien temía que en medio del ambiente agitado el templo terminara sufriendo daños. Gaviria optó por reunirse a puerta cerrada en el estadio con algunas de las madres de las niñas afectadas.

El Ministro dijo que la idea era hacer un “diálogo racional” con la comunidad y crear un “clima de confianza para no seguir estableciendo un diálogo con intermediación de los medios de comunicación que está haciendo daño”. Recalcó que no hay evidencia científica de que la vacuna sea la culpable de los síntomas de las niñas, y que aún no se puede establecer con certeza la causa.

 

Tomado de: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-14478975